Se enrojecieron los cielos A eso de media mañana Y el viento quedó soplando La gran quietud de las aguas Y los pájaros volaron Moviendo suave las alas Y el campesino dejó La tierra donde labraba El campo quedó en silencio Las gentes quietas estaban Porque rezaban el Ángelus A eso de media mañana El campo quedó en silencio Las gentes quietas estaban Porque rezaban el Ángelus A eso de media mañana II Unas manos se juntaron Cuando el sol más alumbraba En aquel reloj de fuego Las doce en punto sonaban Y muchas palabras bellas Hasta el cielo se elevaban Porque eran las oraciones Que el campesino rezaba El campo quedó en silencio Las gentes quietas estaban Porque rezaban el Ángelus A eso de media mañana El campo quedó en silencio Las gentes quietas estaban Porque rezaban el Ángelus A eso de media mañana El campo quedó en silencio Las gentes quietas estaban Porque rezaban el Ángelus A eso de media mañana