Si no quiero, no puedo, no tengo nada. Si por un arrebato rompí tus cartas. Si me hundo en el suelo desde que faltas Dame de tu silencio que me rescate otra vez. Si no encuentro el acorde para explicarme. Si no paso un momento sin acordarme, De el color de la voz y tu olor de tarde, El reflejo maldito que busco siempre en balde No me imaginaba cabalgando en tu ilusión quimera de Todo mi hedonismo. No resguardes el frio lo que te hizo grande y desnuda Tu alma, abrazame y dame calor