Nací en un barrio, donde el lujo fue un albur Por eso tengo el corazón mirando al sur, Mi viejo fue una abeja en la colmena Las manos limpias, el alma buena Y en esa infancia la templanza me forjó Después la vida mil caminos me tendió. Y supe del magnate y del tahúr, Por eso tengo el corazón, mirando al sur La geografía de mi barrio llevo en mí Será por eso que del todo no me fui La esquina, el almacén, el piberío Los reconozco. Son algo mío Ahora sé que la distancia no es real, Y me descubro en ese punto cardinal Volviendo a la niñez desde la luz Teniendo siempre el corazón, mirando al sur.