Desde que pisé tu tierra me enamoraron las flores, Que llevas en la sonrisa de afrodisiacos colores. Fue la bondad de tu ser la que dibujó mis sueños, Con pinceladas y alelas, y un talismán caraqueño. Desde que pisé tu tierra me enamoraron las flores, Que llevas en la sonrisa de afrodisiacos colores. Fue la bondad de tu ser la que dibujó mis sueños, Con pinceladas y alelas, y un talismán caraqueño. Siempre te busco, en mis mañanas Para respirar tus ojos debajo de la ventana. Cuando te encuentro, lo inunda todo Tu silueta de cristal, provocando la codicia De tener aunque sea en sueño alguna de tus caricias. Ay! Ay! Ay! Venezuela, Ay! Ay! Ay! Venezuela. Estas en mi corazón donde he construido un lecho, Para el día en que me vaya llevarte dentro del pecho. Y cuando solo me queden, manos viejas y arrugadas Las lavare con jazmines para que sean tu almohada. Estas en mi corazón donde he construido un lecho, Para el día en que me vaya llevarte dentro del pecho. Y cuando solo me queden, manos viejas y arrugadas Las lavare con jazmines para que sean tu almohada. Siempre te busco, en mis mañanas Para respirar tus ojos debajo de la ventana. Cuando te encuentro, lo inunda todo Tu silueta de cristal, provocando la codicia De tener aunque sea en sueños alguna de tus caricias. Ay! Ay! Ay! Venezuela, Ay! Ay! Ay! Venezuela, Ay! Ay! Ay! Venezuela, Ay! Ay! Ay! Venezuela.