Las últimas hojas que caen del invierno El fin de mis días parece anunciar Si vieras, viejita, qué noche más larga No pude, un momento, los ojos cerrar Estoy desahuciado, no tengo esperanza La fiebre maldita machaca mi ser Y un frío terrible penetra en mis huesos Y estoy sin aliento de tanto toser Por lo que más quieras Decile a la ingrata Que no se avergüence Que me venga a ver Que a pesar de todo La sigo queriendo Con las mismas ansias Que la quise ayer