Prendido de una traba Tu pañuelito secándose Me llamaba diciendo Me duele mucho... despréndeme Me llamaba diciendo Me duele mucho... despréndeme Qué sabrá tu pañuelo, Niña de Salta, que yo no sé Si está el tuyo y el mío Tan empapado de padecer No quiero que lo traigas Cuando me vengas a despedir Soy como tu pañuelo Viendo tu llanto no he de partir Soy como tu pañuelo Viendo tu llanto no he de partir No sé si en tu pañuelo Mi llanto de hombre ha de caber Cuantos llantos que caben En el pañuelo de una mujer