Ella sueña con los astros Y una galaxia cercana, Jugando con las estrellas Hasta llegar la mañana. Su don se lo dio su abuelo En Camagüey, que es su tierra, Para que cuide la noche Y el día con sus tinieblas. Entre cartas el incienso Junto a la luna que mira, Te va diciendo tu suerte Tu futuro, tus heridas. Ella descubre entre "el loco", "El papa", "el sol" y "la muerte", La cura para tu suerte Y un poco más de tu vida. Consultando al millonario, Al pobre, al rey, al obrero, Les mandó un baño de flores Por ser alquimia del cielo. También salvó de la lluvia A un trovador que pasaba; Esa gitana es del monte, Esa gitana es cubana.