Allí donde voy para un rato y sin darme cuenta me han dado las tantas Allí donde haya unas manos cubiertas de heridas o llenas de grasa Allí donde tú puedas verme leyendo en pelotas a Enrique Azcoaga Sin duda ninguna, allí está mi casa Allí donde haya unos focos sacando a este mundo el sudor de mi cara Allí donde escupen palabras que dejan en cuerpos heridas de bala Allí donde acabe un concierto y me pire a lo zorro por la puerta falsa Con bomba de humo, allí está mi casa