No sabes que te pienso, no te puedo soltar. No sabes que te intento a toda costa reemplazar. Si algún día lo logro no lo vas a saber. Hace años que en tus días ya no tengo que ver. No sabes que conservo tu pintura en mi pared. No sabes que te sigo sigiloso por la red. No sabes que estoy vivo, no sabes dónde estoy. Para hacerlo resumido, ya no sabes ni quien soy. Pero sabes que existo, lo difícil ya está. Sabes que existo, no elijas a alguien más. Sabes que existo. Te lo juro, fui verdad. ¿Cómo pudiste avanzar? No sabes expresarte. Bien que sabes coquetear. No sabes relajarte y nunca supiste arriesgar. Pero, ¿sabes? Me marcaste para todas las demás. Tengo más de una sombra y lo tienen que aceptar. La espina de un romance que no se pudo cerrar, Te persigue hasta que la obsesión se hace fe En poder retomar. No sabes de los kilos que sudando eliminé. No sabes del bigote que valiente me dejé. Si te encuentro por la calle, ¿me podrás reconocer? Hay muchas, muchas cosas que yo tampoco sé.