Pequeñito Larousse, El librito en que yo, Aprendí a maldecir y a decir español. La palabra mamá en la "M" busqué Y al final encontré la palabra mujer. Y me fui repasando las palabras tabú de mi nuevo maestro, Mi pequeño Laurosse. Y me fui repasando las plumillas Larousse Y mis ojos de niño en la venus del milo; Y mis ojos de niño en la baja del libro; Y mis ojos de niño masculino plural, Me volvieron un hombre charlatán, singular. Les conté a mis amigos de mi nuevo saber Y se armo mi corrillo de ayer, les hablé: De la "a", de la "b", de la "c" y al llegar a la "h" Confesé que cobarde, confesé que no estaba La mentada me madre. Mi pequeño Larousse, se fue quedando atrás. En la calle aprendía sin tener que buscar. Se formó mi corrillo de palabras corrientes Con las que hablan los hombre y maldicen las gentes. Y entre el Larousse y los cocheros, Entre el papel y los venteros, De mi barrio nació la agridulce manera de cantar español (Bis).