Esta casa nuestra Fuego compartido Ha pasado a ser un espejo roto de lo vivido Déjame evocarte en este regreso Junto a tantos años en que la fe ha muerto también Esta casa nuestra, que fue nuestro nido Oyes esa esa red que atrapa y lo vuelve olvido Déjame llorarte en este regreso Junto a tanta sed que ahoga mi voz y seca mi piel Era tan distinto en aquel ricon Que entonces la lluvia olía a mar Era tan intenso el color azul Y era inexistente la soledad Fuimos tan felices en la quietud de un país abierto, de par en par Hasta que una tarde, la juventud dejo de volar Lléname los ojos Cubreme las manos Déjame que vuelva a sentir la luz de aquellos días Abre las ventanas, quiero oír las voces De aquellos que ayer fueron nuestra luz y otro amanecer Era tan distinto en aquel rincón que entonces la lluvia olía a mar Era tan intenso el color azul y era inexistente la soledad Fuimos tan felices en la quietud de un país abierto, de par en par Hasta que una tarde la juventud dejo de volar Pídele a la noche que llueva otra vez Cierra las ventanas Toma mis manos No me olvides