Huele a ti mi palma y mis manos a la punta de los dedos La espalda y los pies hasta la punta de los pelos Mi sábana, mi almohada y mi perro Mi espíritu, mi alma y mi credo Mis palabras, mi espacio y mi tiempo Se han congelado hasta mis huesos Del sabor a fucsia que tienen tus besos No puedo quitar el olor de ti De mis sábanas nuevas, de mi cojín, de ésa prenda Que usabas después del amor, antes de dormir No sé si entre mi espalda y mi pecho pueda guardar Ese secreto que gritábamos anoche tú y yo Antes y después del sol Si alguien supiera, que daría mi vida entera Por estar contigo de nuevo Porque tú eres la mujer que bota fuego Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama nos sacudimos Eres la mujer, Que se enloquece cuando el ombligo le beso Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama se suelta el pelo Eres la mujer, Que tiene todo el derecho sobre mí Huele a ti mi palma y mi mano hasta la punta de los dedos La espalda y los pies hasta la punta de los pelos Mi sábana, mi almohada y mi perro Mi espíritu, mi alma y mi credo Mis palabras, mi espacio y mi tiempo Se han congelado hasta mis huesos Del sabor a fucsia que tienen tus besos No puedo quitar el olor de ti De mis sábanas nuevas, de mi cojín, de ésa prenda Que usabas después del amor antes de dormir No sé si entre mi espalda y mi pecho pueda guardar Ése secreto que gritábamos anoche tú y yo Antes y después del sol Si alguien supiera, que daría mi vida entera Por estar contigo de nuevo Porque tú eres la mujer que bota fuego Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama nos sacudimos Eres la mujer, Que se enloquece cuando el ombligo le beso Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama se suelta el pelo Eres la mujer, Que tiene todo el derecho sobre mí Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama nos sacudimos Eres la mujer, Que se enloquece cuando el ombligo le beso Eres la mujer, Que bota fuego cuando en mi cama se suelta el pelo Eres la mujer, Que tiene todo el derecho sobre mí