Encontré el amor Cuando sólo había polvo Al oír su canción Sobre lluvias y tesoros. Salieron entonces las estrellas a brillar Las contamos hasta el alba Junto a sus labios eran reinos de cristal A los que mudar mi alma. Encontré el amor Donde sólo había un desierto Y escuché su oración Por la fortuna y el tiempo. Buscamos cobijo En que a salvo siempre estar Del hambre de los vivos Habitamos la cabaña en soledad Y el fuego junto al río. Pero un día llegó en que el río se secó Y su voz se volvió lodo La oración fue por la carne y la ciudad Y el polvo lo cubrió todo. No es tan difícil de adivinar, Las canciones que empiezan sonando mal Después siempre suenan mal. Cabalgar sin parar Bajo la noche estrellada Dónde irán, dónde irán Las canciones que cantamos. Cabalgar sin parar Esta noche de verano, Dónde irán, dónde irán Las canciones que cantamos.