Hoy vi desde otro ventanal las estrellas Y no eran las mismas que aquellas Las que observé durante unos años Alumbrando a las calles del barrio. Hoy vi en un parque a unos niños jugando Sentados en un viejo banco Una pareja fundida en abrazos A veces todavía te extraño. Caminé, transeúnte solitario Entre el tumulto y el asfalto cotidiano... Corro detrás de cada tarde Que se escapó rauda y veloz sin avisarme Pierdo el compás al recordarte No recompensa pensar en ti a cada instante. Hoy vi el primer fulgor de la mañana Cayendo sobre los tejados Vi las primeras hojas volando De este otoño que ha llegado. Quiero ser esa hoja que agita el viento La mano que acaricia tu cuerpo Como lo fui todos esos años A veces todavía te extraño. Caminé, transeúnte solitario Entre el tumulto y el asfalto cotidiano. Corro detrás de cada tarde Que se escapó rauda y veloz sin avisarme Pierdo el compás al recordarte No recompensa pensar en ti a cada instante.