El treinta de abril, Jesucristo García Bajó de los cielos pidiendo amnistía No, yo no soy Jesucristo García A mí no vienen a verme los enfermos A mí viene a verme la gente sana Y les pongo a todos ciegos! Concreté La fecha de mi muerte con Satán Le engañé Y ahora no hay quien me pare, ya los pies Razonar Es siempre tan difícil para mí Qué más da Si al final todo me sale siempre bien, del revés Nací un buen día, mi madre no era virgen No vino el rey, tampoco me importó Hago milagros, convierto el agua en vino Me resucito si me hago un canutito Soy Evaristo, el rey de la baraja Vivo entre rejas, antes era chapista Los mercaderes ocuparon mi templo Y me aplicaron ley antiterrorista ¿Cuánto más necesito para ser dios, dios, dios? ¿Cuánto más necesito convencer? ¿Cuánto más necesito para ser dios, dios, dios? ¿Cuánto más necesito convencer? Y perdí La cuenta de las veces que te amé Desquicié Tu vida por ponerla junto a mí Vomité Mi alma en cada verso que te dí ¿qué te di? Olvidé Me quedan tantas cosas que decir ¿qué decir? Por conocer a cuantos se margina Un día me vi metido en la heroína Aún hubo más, menuda pesadilla Crucificado a base de pastillas Soy Evaristo, el rey de la baraja Vivo entre rejas, antes era chapista Los mercaderes ocuparon mi templo Y me aplicaron ley antiterrorista ¿Cuánto más necesito para ser dios, dios, dios? ¿Cuánto más necesito convencer? ¿Cuánto más necesito para ser dios, dios, dios? ¿Cuánto más necesito convencer? Resucité al tercer día en el psiquiátrico Absurdo invento