Hace tiempo atrás Te prometí una canción. Quizás ya no te acuerdes Porque el destino nos separó. Sigo estando aquí Y recuerdo cada día Aquellos tiempos de infancia Que ya jamás volverán. Sé que estás en un reino de cristal, Donde al fin nace tu felicidad. No hay fronteras que nos puedan separar, Porque tú eres mi otra mitad. Tantos años llenos de ilusión, Entre libros, sin apenas Ver el sol de las mañanas... Y hoy al fin tu sueño se cumplió. Tienes que dejarme presumir De llevar tu misma sangre, Déjame ser tu profeta en la tierra Puesto que el cielo se te concedió. Sé que estás en un reino de cristal, Donde al fin nace tu felicidad. No hay fronteras que nos puedan separar, Porque tú eres mi otra mitad. Sólo ahora, con esta canción Puede hablar mi corazón. Me di cuenta de todo lo que perdí Cuando ya no estabas aquí. Sé que estás en un reino de cristal, Donde al fin nace tu felicidad. No hay fronteras que nos puedan separar, Porque tú eres mi otra mitad.