En guerra cruel contra el inglés Va a perder el francés De un pueblo el más rico tesoro Su honor, su libertad. Pero Juana de Arco, Su confianza pone en Dios Y Dios con agrado, luego atiende su oración Ella pobre pastorcita, Tímida cual ovejita Recibió... orden celestial. De qué a su patria, su amada Francia, Debe acudir a salvar O misión sublime y bella Más podrá débil doncella Empuñar alma guerrera Y triunfar en la lucha fiera Dios le da fuerza y denuedo Vedla ya como sin miedo Va a cumplir lo que le ordenan Y Francia se salvará... y vivirá.