Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Ya es común a la vuelta de mi casa sentir el aroma a la macoña Ver a los niños como enrollan, ya no chupan coyac Ahora la moda es beber royal Mientras la doña le celebra cada palabrota que de su boca brota Y es común ver a mis hermanos peruanos, Colombianos, ecuatorianos, viviendo hacinados Agobiados por un trabajo del cual son esclavos Al servicio de este mercado envenenado Y claro, a los señores del senado no les interesa Porque ellos también son dueños de las empresas Y mientras sus empleados negros se la resisten Sus hijos están en Europa haciendo un magíster Van becados con dinero del estado, Esto no es inventado es panorama cotidiano Pero esto común es simplemente el resultado De corazones altivos que hemos levantado Es común pero no es normal Señor que venga tu reino para restaurar esta realidad Aquí está mi voz para proponer y denunciar Y anunciar que la paz de tu mano vendrá Que nuestra destrucción nace del corazón Esclavizado a la indiferencia y la ambición Y dime quién no temblará cuando ruja el león, Tu dime quién no temblará cuando ruja el león Es común escuchar a nuestra gente obrera Levantar afrentas cuando el corrupto llena su cartera Pero la primera oportunidad cualquiera de Sacar provecho tampoco les tirita la pera Así que vela Prende la TV y ya verás Que ya es común que se celebre el adulterio en la novela Y pregúntale a mi abuela si alcanza la pensión Para todos los remedios y las horas en el doc Y es común las marchas contra las AFP Como también ver a los hijos desentenderse Así que la próxima vez que proteste mejor Cuide de su viejo para que no sea incoherente Ya es común que nuestros corazones Se apasionen por posesiones y también por posiciones Mientras que los que se encuentran en prisiones Las viudas y los huérfanos ruegan en oraciones Es común pero no es normal Señor que venga tu reino para restaurar esta realidad Aquí está mi voz para proponer y denunciar Y anunciar que la paz de tu mano vendrá Que nuestra destrucción nace del corazón Esclavizado a la indiferencia y la ambición Y dime quién no temblará cuando ruja el león Tu dime quién no temblará cuando ruja el león Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga! Que venga! que venga! No hay quien lo detenga!