Las verdes cañas de allá en Candiani Son la belleza de quel lugar, Veremos, niña, parece alfombra Que con el viento se mira ondear. Probé el almíbar que allí brotaba Y hallé más dulce niña sin par, De tu donaire, tus ojos dulces, Grandes y bellos como el azahar. Llévame oaxaqueña, Llévame a tu país, Llévame a quella tierra Donde te conocí. Que hasta la luz del día Es más intensa allá, Difunde mil colores Que vi en el río del Atoyac.