Otra vez la triste señora se te atraviesa en el camino En una mano una balanza y en la otra ella porta el arma Está muy claro el simbolismo sobre todo el de la venda Es la verdad toda la verdad y nada más que su manipulada verdad. Es la ley... Huele a podrido todo lo que toca Vende su alma, pero eso ¿a quién le importa? La ordenación racional de la sociedad Bajo la coacción, esa es la forma de razonar. Haciendo obedecer Tu falso instinto maternal Ya no te trato de usted Señora justicia. Ahoga sus penas en la botella, marca patética dominación Mirando su rostro desde aquí no me parece muy feliz No se complica nada la vida, no busca más que tu purgación Ojo por ojo, diente por diente, sin duda alguna mujer ardiente Es la ley. Huele a podrido... Es la ley...