No alcanza para tanto, el simple propósito De que en medio de este lago de podredumbre Se despierte como de las mismas pailas, el vinculo con la gracia. Vale más irnos todos al cañón, lanzarnos en masa al paisaje pedregoso Que no admite requiebros, y en menos que salte un ojo, terminemos todos parios. Fuera de mí, que están las ladivas, No me despidas, un bulto de panela y una bolsa de suspiros Si acaso puede, este pueblo, soportar un siglo más de pelidez Vivan la furia y la lujuria, y el día menos pensado, llegue al fin. Mirad esta avalancha de inconsecuencia, No es otra cosa, si no la confirmación del universo No dejemos pasar este momento de inconsciencia Paisanos míos, brindemos por el fracaso. Farra garrotera, farra garrotera Farra garrotera, farra garrotera. A ver mis gaviotas de piedecuesta.