Quisiera ser leucocito Y navegar por tus venas Como si fuera un barquito Bogando en la mar serena Y naufragar en la playa De tu corazón de arena Quisiera ser cigarrillo Dentro de tu pitillera Y esconderme en tu bolsillo Para estar siempre a tu vera Que nos mira tu mujer Y se pone hecha una fiera Si tu esperas en la cumbre Y te aguardo en el llano Nunca encenderemos lumbre Del roce de nuestras manos Y que tonta pesadumbre Mirarnos siempre lejanos Y que tonta pesadumbre Mirarnos siempre lejanos Sí, señor; sí, señor, que tú me pierdes Sí, señor, dame un siseñor con las patas verdes Sí, señor; sí, señor, que tú me pierdes Sí, señor, dame un siseñor con las patas verdes Quiero ser idea fija Y acomodarme en tu mente Entrando por la rendija abierta de tu inconciente Y que sea inevitable tenerme siempre presente Quisiera ser inicial En incrustación bordada Un motivo ornamental En el centro de tu almohada Que amanezca a tu mejilla Con mi nombre señalada Que amanezca a tu mejilla Con mi nombre señalada Voy a asaltar tu castillo Con audacia delincuente Y voy a hacer picadillo De tus ideas decentes Házmelo algo más sencillo Tendiéndome a tiempo un puente Házmelo algo más sencillo Tendiéndome a tiempo un puente Sí, señor; sí, señor, que tú me pierdes Sí, señor, dame un siseñor con las patas verdes Sí, señor; sí, señor, que tú me pierdes Sí, señor, dame un siseñor con las patas verdes