Yo quisiera decirle a la gente Lo que mi alma siente cuando pienso en ti. Un amor que te besa en la frente, Dulce y sonriente, contento y feliz. Madrecita María del Carmen, en mi corazón Se me vuelve tu querer cante campero Y cantando te digo cuánto te quiero, Flor bendita de mi vida y mi ilusión. Un altar llevo en mi pecho ardiente A la madre que me dio a mí el ser. A esa mujer tan buena y valiente, De inmaculada frente ceñida de laurel. Madrecita María del Carmen, Hoy te canto esta bella canción. Con ella te brindo mi cariño, Y lo mismo que cuando era un niño En mis labios pongo el corazón. Con ella te brindo mi cariño, Y lo mismo que cuando era un niño En mis labios pongo el corazón. De rocío se llenan las flores, Que en la noche bella beben sin cesar. Y mi alma se llena de amores Cuando pienso en ella y empiezo a cantar. Y la copla hecha golondrina se pone a volar. Y llegando hacia mi madre se reclina, Y en sus brazos de azucena y clavellina Es mi alma la que se pone a soñar. Un altar llevo en mi pecho ardiente A la madre que me dio a mí el ser. A esa mujer tan buena y valiente, De inmaculada frente ceñida de laurel. Madrecita María del Carmen, Hoy te canto esta bella canción. Con ella te brindo mi cariño, Y lo mismo que cuando era un niño En mis labios pongo el corazón. Con ella te brindo mi cariño, Y lo mismo que cuando era un niño En mis labios pongo el corazón.