Ayer no vino nadie a despedirle El tren partió, nadie agitaba su pañuelo Y la verdad, le veo un poco triste Pensó que tú, que tú si acabarías apareciendo Se va de aquí, te deja con tu gente Tampoco nunca sintió ser de tu mundo Vive tu vida escrita en el presente Él mira sin guion de frente a su futuro Que no será gran padre ni un buen hijo Ni llegará primero en la carrera Pero sabrá escribir en sus libritos La más hermosa letra de la tierra Y no verás su nombre en los diarios La fama no vendrá jamás a verle Pero de madrugada en los tejados Será su boca atada la que suene Ahora que en parte a ti que no viniste A despedirle aquel día en el andén Que en realidad él nunca quiso irse Y ahora se muere por volver Por volver se muere, por volver Volver, se muere por volver Se muere por volver Volver, se muere por volver Se muere por volver Volver, se muere por volver Se muere por volver Ayer no vino nadie a despedirle