Ya no tiembla aquella luz que apaga la ciudad No me quiere dar el sol, respuesta Este mar ya no es azul y aquel faro dónde está Esperando mudo a que este amor, no vuelva... En la soledad del tiempo no me puedo refugiar Ni trepando a la azotea de mis sueños Ni rogando a un dios siniestro por mis miedos, sin pensar Que me rindo ante el aroma tu aliento... Miro bien, pa no dejar pasar Lucharé, tratando de escapar Sé muy bien que nadie me abrirá la puerta... Siento que, la vida se me va Pienso que es un día nada más Quiero ser tan sólo un fiel poeta de mi tierra... Mírame al marchar, no me importa dónde vas No hagas ruido ni molestes al cerrar la puerta Me cansé de jugar, ya no puedo perdonar Déjale a mi corazón que duerma Y me sigues por encima de los hombros, al compás Me desligo de tu piel y de tu asombro... De vivir nuestro recuerdo y de llorar no eres capaz Tus alardes no acobardan a mis ojos Miro bien, pa no dejar pasar Lucharé, tratando de escapar Sé muy bien que nadie me abrirá la puerta... Siento que, la vida se me va Pienso que es un día nada más Quiero ser tan sólo un fiel poeta de mi tierra... Mírame al marchar, no me importa dónde vas No hagas ruido ni molestes al cerrar la puerta Me cansé de jugar, ya no puedo perdonar Déjale a mi corazón que duerma