Cuando lejos estás inalcanzable Y me quemo por dentro en mi agonía Palpo tu carne al tacto de la mía Y me invade un placer inevitable ♪ Marco un ritmo de amor y en la nostalgia Crece en mis manos toda la esperanza De ese momento eterno que se alcanza Cuando entregas feliz toda tu savia ♪ Cada cadencia evoca una silueta Tierna, dulce, febril, desesperada Tu bella desnudez desde la nada Va naciendo a la luz que me embelesa La violencia de un rayo me atraviesa Clara, impoluta, mi alma surge pura Fuegos artificiales te saludan Derramándose en mí como una fiesta ♪ Calmo, sediento, lento, relajado Llega un sueño feliz que me ennoblece Mientras canto y tu rostro reaparece Y me guarda en la noche, enamorado