Quedará al calor del vino Las miradas, los recuerdos siempre quedarán Y el sabor de tu beso furtivo Quiera Dios que la vida nos dé la razón Este amor como un juego del destino Que navega entre la dicha y el dolor Como un sueño herido perdido en el tiempo Guardado en el pecho en ese último adiós Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Y si el lucero brilla con toda su intensidad A la mar le entrego toda la nostalgia Guardada en el pecho en ese último adiós Quedará Renacer de este fiero cino Que mutila los puros corazones Que nos roba el alma y las ilusiones Quiera Dios que la vida nos de la razón Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Y si el lucero brilla con toda su intensidad A la mar le entrego toda la nostalgia Guardada en el pecho en ese último adiós Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo Quedará, las manos, los pensamientos Las palabras quedarán escritas en el cielo