Mi tronco húmedo en tus ideas No sabe en qué tierra anclar Por los vaivenes de mi mente flirteas En rompan filas mis penurias al cantar Se resquebraja el silencio en la grúa Y la quietud salvaje de mi soledad Y la tierra, que es mi abrigo, devalúa El precio de la vida a mi pesar Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera Cuero y cristal en carretera Vibrando en el color de tus recuerdos Perdido en el desván de mis ojeras Soñando que, en mi insomnio, estoy despierto Mis ramas bajo el aguacero están ardiendo En cascadas de una luz reveladora Mi boca echa de menos los momentos Donde, a veces, se calló para oír otras Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera Entre las nubes de invierno viejos fantasmas resuenan Diluviando en flor de estiércol mis olores de madera