Voy colgado a tu cintura, Tus excesos, tu ternura, A esos besos que aparecen Cuando pierdo la cordura Sos tan blanca, tan oscura, Tan ingenua, tan segura Que me abrazas, me rechazas, Y en mi cuarto te desnudas Que después junto a la luna Silenciosa te me esfumas Sin un gesto, sin decir adiós En la cornisa de tus manos sigue mi corazón En la cornisa sueño y rezo por un poco de amor Y a la buena de Dios y a la buena de Dios estoy En la cornisa de tus manos sigue mi corazón En la cornisa sueño y rezo por un poco de amor Y a la buena de Dios y a la buena de Dios estoy Sigo siendo el que te escucha Te maldice y se disculpa Por tus lágrimas sinceras Que aparecen por las dudas Por los dichos, por la culpas, Todas juntas y ninguna, Porque sigo siendo el tonto Que te ama con locura La locura que me alumbra En las noches que te esfumas Sin un gesto, sin decir adiós En la cornisa de tus manos sigue mi corazón En la cornisa sueño y rezo por un poco de amor Y a la buena de Dios y a la buena de Dios estoy En la cornisa de tus manos sigue mi corazón En la cornisa sueño y rezo por un poco de amor Y a la buena de Dios y a la buena de Dios estoy Si nada es casual Si todo es verdad Si puedes cambiar Y aceptar de una vez que soy parte de ti Yo te puedo esperar Yo te voy a esperar En la cornisa de tus manos sigue mi corazón Y a la buena de Dios estoy En la cornisa de tus manos sigue mi corazón Y a la buena de Dios estoy