Ya todos sabían que era pistolero Ya todos sabían que era muy valiente Por eso las leyes ni tiempo le dieron El día que a mansalva y cobardemente le dieron la muerte En Brownsville estuvo un tiempo prisionero Y al ser sentenciado de ahí se fugó Se vino a Reynosa, su pueblo querido Gerardo González, de forma cobarde La muerte encontró Era decidido, miedo le tenían Sus enemigos y la policía A punta de bala lo hicieron pedazos No pudo salvarse, tenía en el cuerpo catorce balazos En Brownsville estuvo un tiempo prisionero Y al ser sentenciado de ahí se fugó Se vino a Reynosa, su pueblo querido Gerardo González, de forma cobarde La muerte encontró Vuela palomita a llevar el mensaje Te vas de Reynosa al lado americano Le cuentas a todos que le han dado muerte A un compañero y fiel pistolero El Chito Cano