Lo que tanto se sufre sin sueño y por la sangre Se escucha que palpita solamente la rabia Que en los tuétanos tiembla despabilado el odio Y en las médulas arde continua la venganza Las palabras entonces no sirven, son palabras Manifiestos, escritos, comentarios, discursos Humaredas perdidas, neblinas estampadas Qué dolor de papeles que ha de llevar el viento Qué tristeza de tinta que ha de borrar el agua Las palabras entonces no sirven, son palabras Ahora sufro lo pobre, lo mezquino, lo triste Lo desgraciado y muerto que tiene una garganta Cuando desde el abismo de su idioma quisiera Gritar lo que no puede por imposible y calla Las palabras entonces no sirven, son palabras Siento esta noche heridas de muerte las palabras