Quiero verla que se venga aquí, Que diga lo que tiene en la cabeza. Y otra noche me entrego y después, Después iré a sufrir por su belleza. Quiero verla que se venga aquí, A ver si se disculpa por ser cruenta. Porque partió mi corazón y no cedió, Porque también se lo llevo y me dolió más de la cuenta. Y me dejó un sabor amargo y no cedió Que se llevó mi corazón y el día de hoy no se lamenta. Muchacho, no te lastimes cantando, no me lamentas. Lamento decirte basta. Lamento decirte basta pero una vida te espera. Con tanto amor para dar puedes dárselo a cualquiera. Cualquiera que se te anime a tu santos y a tus polleras, A tus vicios de mañana, a tu gira interminable de morir con tu soberbia, Que tus amigas te esperan, si todavía te esperan. (Pregones) Ya no sé que pasa entre los dos, ya no sé Ni tampoco me interesa. Ayer y hoy enredándome los pies. Tan despiadada y yo buscándote otra vez. Yerba mala que me atrapa, yerba mala nunca muere. Mi corazón te prefiere despiadada y cruel por naturaleza.